Inflamación de los vasos sanguíneos en los pulmones (vasculitis) Lesión a las arterias pulmonares. Irritación de la garganta por tos violenta (pequeñas cantidades de sangre ) Neumonía u otras infecciones pulmonares.
Contents
La hemoptisis hace referencia a la tos con sangre proveniente de alguna parte de los pulmones (aparato respiratorio). La sangre que provenga de otros lugares, como el estómago, puede aparentar ser de los pulmones. Es importante que el médico determine el lugar del sangrado y luego determine por qué toses con sangre.
Las causas que se indican aquí suelen estar relacionadas con este síntoma. Trabaja con el médico u otro profesional de la salud para obtener un diagnóstico preciso. Las causas que aquí se muestran se asocian comúnmente con este síntoma. Trabaja con tu médico u otro profesional de atención médica para obtener un diagnóstico preciso.
Cuando se escupe sangre puede ser un signo de que hay una infección o inflamación de las vías aéreas, pudiendo ser indicativo de bronquitis o bronquiectasia, por ejemplo, siendo normalmente acompañado de otros síntomas como dificultad para respirar, dolor en el pecho y cansancio. Las principales situaciones que pueden ocasionar un esputo con sangre:
La tos con sangre procedente del tracto respiratorio se denomina hemoptisis. La cantidad de sangre expulsada puede variar desde unos pocos hilos de sangre mezclada con esputos normales hasta grandes cantidades de sangre pura. Pueden aparecer otros síntomas, como fiebre y dificultad para respirar, en función de la causa de la hemoptisis.
Aunque la hemoptisis puede ser muy alarmante, en la mayoría de los casos la causa no es grave. La expectoración sanguinolenta es común en muchas enfermedades respiratorias leves, como las infecciones de las vías respiratorias altas y la bronquitis vírica. A veces la causa es una hemorragia nasal en la que la sangre desciende hasta la garganta y luego se expulsa mediante la tos.
Este sangrado no se considera hemoptisis. En los niños, las causas frecuentes son
Una infección del tracto respiratorio inferior Un cuerpo extraño que ha sido inhalado (aspirado)
La hemoptisis masiva es la expulsión de más de una pinta (unos 600 mL) de sangre en 24 horas. Entre las causas más frecuentes se incluyen las siguientes: Algunas situaciones aumentan el riesgo de que la hemoptisis esté causada por un trastorno grave:
Uso de medicamentos que inhiben el sistema inmunitario, llamados inmunosupresores (riesgo de tuberculosis e infecciones por hongos) Exposición a la tuberculosis Tabaquismo de larga duración (para el cáncer)
La siguiente información puede ayudar a decidir si es necesaria la evaluación de un médico y a saber qué esperar durante esta. En los pacientes con hemoptisis, los siguientes síntomas son especialmente preocupantes:
Expulsión de grandes cantidades de sangre Dificultad respiratoria Signos de pérdida de sangre significativa (debilidad, mareos al ponerse de pie, sed, sudoración y ritmo cardíaco rápido) Debilidad o fatiga Tener una traqueotomía
Cuando existen signos de alarma se debe acudir al hospital de inmediato. Los pacientes sin signos de alarma que tienen factores de riesgo de padecer trastornos graves y aquellos con un sangrado más intenso que unas hebras en el esputo deben ver a un médico en un día o dos.
Por lo general, un retraso de un par de días más o menos no es perjudicial. En primer lugar, el médico pregunta acerca de los síntomas del paciente y su historial médico y, a continuación, realiza una exploración física. Los antecedentes clínicos y la exploración física a menudo sugieren la causa de la hemoptisis y orientan acerca de las pruebas que pueden ser necesarias ( Algunas causas y características de la hemoptisis Algunas causas y características de la hemoptisis ).
2. ¿Cuándo es demasiada tos para ir al médico? – Tener tos es normal, sin embargo si es tos persistente en el tiempo puede deberse a un problema médico, generalmente, a enfermedades relacionadas con nuestro aparato respiratorio. “Cualquier tos que dure más de un mes es conveniente que sea valorada por un especialista”, afirma Fernández Francés.
También es preciso consultar cuando la tos vaya acompañada de expectoración con mucosidad descolorida o con sangre. Para tratar la tos, lo importante y fundamental es encontrar la causa o enfermedad que la provoca, apunta el experto: “Tratando la causa, se suele eliminar la tos”. Lo más habitual, explica, es que la tos se origine en el aparato respiratorio, bien en el alto (de las cuerdas vocales para arriba: garganta, nariz) o bien en el bajo (de las cuerdas vocales para abajo, que normalmente suele ser productiva).
Aunque también se puede originar por otras causas -aunque son casos mucho más raros- como enfermedades esofágicas o del oído, por ejemplo.
La mayoría de los cánceres de pulmón solo causan síntomas cuando ya se han propagado. Sin embargo, algunas personas con cáncer de pulmón en etapas tempranas presentan síntomas. Si acude al médico cuando comienza a notar los síntomas, es posible que el cáncer se diagnostique en una etapa más temprana cuando es más probable que el tratamiento sea eficaz.
Una tos que no desaparece o que empeora Tos con sangre o esputo (saliva o flema) del color del metal oxidado Dolor en el pecho que a menudo empeora cuando respira profundamente, tose o se ríe Ronquera Pérdida del apetito Pérdida de peso inexplicable Dificultad para respirar Cansancio o debilidad Infecciones como bronquitis y neumonía que no desaparecen o que siguen recurriendo Nuevo silbido de pecho
Si el cáncer de pulmón se propaga a otras partes del cuerpo, puede causar:
Dolor en los huesos (como dolor en la espalda o las caderas) Alteraciones del sistema nervioso (como dolor de cabeza, debilidad o adormecimiento de un brazo o una pierna, mareos, problemas con el equilibrio o convulsiones) a causa de la propagación del cáncer al cerebro Coloración amarillenta de la piel y los ojos (ictericia) a causa de la propagación del cáncer al hígado Hinchazón de los ganglios linfáticos (grupos de células del sistema inmunitario) como las del cuello o por encima de la clavícula
Algunos cánceres de pulmón pueden causar síndromes, los cuales son grupos de síntomas específicos.
La tos con sangre procedente del tracto respiratorio se denomina hemoptisis. La cantidad de sangre expulsada puede variar desde unos pocos hilos de sangre mezclada con esputos normales hasta grandes cantidades de sangre pura. Pueden aparecer otros síntomas, como fiebre y dificultad para respirar, en función de la causa de la hemoptisis.
Este sangrado no se considera hemoptisis. En los niños, las causas frecuentes son
Una infección del tracto respiratorio inferior Un cuerpo extraño que ha sido inhalado (aspirado)
La hemoptisis masiva es la expulsión de más de una pinta (unos 600 mL) de sangre en 24 horas. Entre las causas más frecuentes se incluyen las siguientes: Algunas situaciones aumentan el riesgo de que la hemoptisis esté causada por un trastorno grave:
Uso de medicamentos que inhiben el sistema inmunitario, llamados inmunosupresores (riesgo de tuberculosis e infecciones por hongos) Exposición a la tuberculosis Tabaquismo de larga duración (para el cáncer)
La siguiente información puede ayudar a decidir si es necesaria la evaluación de un médico y a saber qué esperar durante esta. En los pacientes con hemoptisis, los siguientes síntomas son especialmente preocupantes:
Expulsión de grandes cantidades de sangre Dificultad respiratoria Signos de pérdida de sangre significativa (debilidad, mareos al ponerse de pie, sed, sudoración y ritmo cardíaco rápido) Debilidad o fatiga Tener una traqueotomía
Cuando existen signos de alarma se debe acudir al hospital de inmediato. Los pacientes sin signos de alarma que tienen factores de riesgo de padecer trastornos graves y aquellos con un sangrado más intenso que unas hebras en el esputo deben ver a un médico en un día o dos.
Por lo general, un retraso de un par de días más o menos no es perjudicial. En primer lugar, el médico pregunta acerca de los síntomas del paciente y su historial médico y, a continuación, realiza una exploración física. Los antecedentes clínicos y la exploración física a menudo sugieren la causa de la hemoptisis y orientan acerca de las pruebas que pueden ser necesarias ( Algunas causas y características de la hemoptisis Algunas causas y características de la hemoptisis ).
¿Qué tipos de tos existen? – Existen varios tipos de tos. En función de su duración, la tos puede ser:
Tos aguda: dura menos de tres semanas y suele comenzar de manera repentina. Entre las principales causas, se hallan las infecciones de las vías respiratorias altas, y también la bronquitis aguda, Una reagudización del asma bronquial, la neumonía, la exacerbación de una enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y el goteo postnasal, que se produce, por ejemplo, cuando existe sinusitis y las secreciones se drenan hacia la garganta o la faringe, son otras causas frecuentes de aparición de tos.
La causa más común de la tos seca es la irritación de la garganta. Otras causas menos habituales son la presencia de un trombo en las arterias de los pulmones (señal de embolia pulmonar), insuficiencia cardiaca o haber aspirado un cuerpo extraño como un trozo de comida.
T os subaguda: que dura entre 3 y 8 semanas, La tosferina como causa de tos subaguda y que puede tender a cronificarse está incrementando su presencia en los últimos años. La tos post-infecciosa puede aparecer en este intervalo debido a la irritación de las vías respiratorias tras haber sufrido una infección. Tos crónica: se prolonga más de 8 semanas. Dado que la tos continua irrita la tráquea y la laringe, puede tender a perpetuarse. Según la SEPAR, su prevalencia en la población general varía entre el 3,3% y el 12%. Las principales causas de la tos crónica son la bronquitis crónica, el asma, el reflujo gastroesofágico y, también, el goteo postnasal. Otras causas menos comunes son la tuberculosis, el tratamiento con algunos fármacos utilizados fundamentalmente para la hipertensión arterial e infecciones pulmonares por hongos. Además, las personas con demencia o con secuelas producidas por un accidente cerebrovascular pueden tener problemas para tragar, lo que les lleva a aspirar hacia la tráquea comida, bebida o, incluso, su propia saliva o contenido gástrico. En ocasiones, la tos puede ser también síntoma de un cáncer de pulmón.
En función de si hay o no expectoración, la tos puede clasificarse en:
La tos es la expulsión repentina y con fuerza del aire de los pulmones. Es una de las causas más frecuente de consulta al médico. La función de la tos es eliminar material de las vías respiratorias y proteger a los pulmones de partículas inhaladas.
Qué distingue la tos seca de la productiva – La característica que más claramente se aprecia en la tos seca, la que está relacionada con el nuevo coronavirus, es que no produce expectoración. Es decir, no llega acompañada de moco. Es irritativa y a menudo provoca dolor en la garganta o en el pecho, además de la molesta irritación, según un artículo publicado en la revista de farmacia Offarm que describe las peculiaridades de este síntoma.
Una de las consecuencias de la tos seca es que hace que descansar por la noche sea bastante difícil. Eso provoca un cansancio generalizado, que, junto a la fiebre, también es un síntoma común de las infecciones del nuevo coronavirus, aunque por causas distintas.
La característica más clara de la tos productiva, que es típica de infecciones como la que provoca el resfriado, es que sí arroja moco. El esputo suele formarse debido al aumento de las secreciones bronquiales, cuya acumulación desencadena el reflejo necesario para expulsarlo.
Esta explosiva cualidad es un mecanismo muy eficaz para despejar los conductos respiratorios, pero también es determinante en la expansión de los patógenos que infectan a través del sistema respiratorio, como el nuevo virus. Las gotas que el organismo expulsa contienen patógenos que el cuerpo ha conseguido eliminar, pero que pueden acabar reproduciéndose en otras personas.