Cuando nos hacemos una herida, sufrimos un pequeño accidente y nos lesionamos o sangramos por la nariz, es muy probable que alguna de nuestras prendas de ropa acabe manchada por un poco de sangre, Y ante tal situación, lo ideal sería actuar cuanto antes para que eliminar esa mancha no se convierta en un proceso complejo.
Pasos a seguir: 1 Las manchas de sangre en la ropa deben limpiarse lo antes posible, pues cuantos más días transcurran y más secas estén, serán muchísimo más difíciles de eliminar. Toma en cuenta que las manchas de sangre se disuelven con agua fría fácilmente y que, por ello, lo primero que debes hacer es dejar la prenda en remojo en abundante agua fría durante unas horas para que la sangre seca se vaya desintegrando.
Pasado ese tiempo, coge un cepillo de cerdas suaves y frota enérgicamente con movimientos circulares y vuelve a aclarar la prenda con agua fría. Seguidamente, ya puedes lavar la prenda en la lavadora como lo haces habitualmente. No olvides consultar antes su etiqueta para ver los símbolos que se especifican para lavarla correctamente y evitar que se dañe. 3 Si el método anterior no ha acabado por completo con esa mancha de sangre seca tan resistente, puedes poner a prueba algunas de las soluciones que te mostramos a continuación. Una bastante eficaz es la de usar una mezcla de amoniaco y agua, pues normalmente este preparado elimina las manchas más complicadas.
Ropa de color – Tus sábanas más molonas y tus braguitas color flúor recuperarán sus colores vibrantes con solo dos ingredientes: sal y ¡agua fría! Mezcla en un bol agua fría y sal a partes iguales hasta que quede una pasta espesa. Pon la mancha en remojo en agua fría y frota la pasta con un cepillo de dientes viejo sobre la mancha.
Las hemorragias nasales o los periodos menstruales son episodios comunes que suelen provocar manchas de sangre en la ropa. Lo peor, aparte de ver una prenda teñida por ese rojo intenso, es que cuando se lavan mal queda un manchón café oscuro, y aunque siempre está la esperanza que en el siguiente lavado esa mácula se difumine, es probable que nunca vaya a salir.
Después de buscar, leer e instruirnos en este tipo de manchas, llegamos al blog de la lavandería y tintorería Mr. Jeff, en el que explican que lo tradicional es remojar la tela en agua fría con jabón —para que la mancha así pueda ablandarse—, y luego dejar reposar por 15 minutos. Si esto no dio resultado, Mr. Jeff tiene otro truco: una milagrosa combinación de amoniaco y agua oxigenada. “Mezclamos una cucharada de amoniaco con medio vaso de agua oxigenada, de forma que se integren bien ambos elementos”, sugieren en el blog.
La mezcla se debe aplicar encima de la mancha, ojalá a través de un pulverizador, y frotarla con un cepillo de dientes. Tras reposar por 5 minutos, hay que enjuagar la zona, y luego queda lista para ser lavada tradicionalmente junto a las otras prendas.
Normalmente, una mancha vieja de sangre, ya seca y marrón, puede ser un dolor de cabeza. ¡Pero no más! En el sitio español Clara explican que el agua oxigenada es una de las herramientas caseras más eficaces para deshacernos de manchas, y precisamente es el producto estrella para eliminar la de sangre seca. Lo primero que debes hacer es aplicar el agua oxigenada a la mancha.
Quitar manchas de sangre Con bicarbonato de sodio y vinagre Las claves son echar bicarbonato sobre la mancha y después, verter el vinagre para que la mezcla actúe de 20 a 30 minutos. Pasado este tiempo, retira los restos de la mezcla con un paño o trapo húmedo.