En el caso de sangrado intenso, toma estas medidas de primeros auxilios y tranquiliza a la persona lesionada.
En los casos de sangrado intenso que no puedas controlar, llama al 911 o a un servicio de emergencia médica.
Contents
Cómo detener el sangrado abundante con un torniquete – Un torniquete es una banda apretada que se usa para detener el flujo sanguíneo hacia una herida, como también para evitar que el paciente padezca choque. En general, un torniquete solo se debe usar en dos situaciones:
Un torniquete solo se debe usar en una situación en que haya sangrado abundante incontrolable, y solo si no ha funcionado ningún otro método. A menudo, las personas se ven con la necesidad de usar este método en casos de emergencias, tales como accidentes automovilísticos, heridas de bala, cortadas profundas o extremidades con lesiones por aplastamiento.
De preferencia, un socorrista debería ser quien aplica un torniquete, pero si es necesario aplicarlo antes de que llegue la ayuda médica, hay maneras en que puede hacerlo usted. De acuerdo con Very Well Health, los torniquetes improvisados son eficaces en hasta un 30 a 35 por ciento de los casos. Tenga en cuenta que los torniquetes solo se deben usar en extremidades lesionadas, mas no se pueden usar para lesiones en la cabeza, el cuello o el torso.
Recuerde que un torniquete solo se debe usar después de haber aplicado presión directa y solo si el sangrado no disminuye o se detiene con esta. Para hacer un torniquete improvisado con artículos que tiene en casa, necesitará algo con que envolver la extremidad, tal como una venda triangular, un cinturón, una toalla o una camiseta.
Además, necesitará algo que le sirva de “molinete” (como un palo, un lápiz o una cuchara). Básicamente, el molinete es una palanca que se usa para apretar el torniquete. Primero, encuentre el lugar de dónde proviene el sangrado. Tenga en cuenta que la aplicación de un torniquete puede ser muy dolorosa para la persona lesionada – sin embargo, a menudo es una medida esencial que podría salvar la extremidad o la vida de la persona.
Después, en un área que está a varias pulgadas arriba de la lesión coloque el artículo que usará como torniquete. El torniquete se debe colocar en la parte de la extremidad que se encuentra más cercana al corazón. Si la lesión está abajo de la rodilla o el codo, el torniquete se debe aplicar arriba de la articulación.
Amarre la tela y hágale un nudo; asegúrese de dejarles suficiente tela de largo a las puntas del nudo. Agarre el palo (o cualquier artículo que usará como molinete), colóquelo sobre el nudo, amárrelo con las puntas sueltas del torniquete (tela) y empiece a girar el palo para aumentar la presión. Continúe girando el palo hasta que se detenga el sangrado o hasta que este disminuya considerablemente.
Tenga en cuenta que no debe dejar puesto un torniquete por más de dos horas. Necesitará anotar la hora en que aplicó el torniquete para que los paramédicos puedan ver esa información al llegar.
Aplica un trapo tibio y presiona – El trapo con agua tibia, siempre que esté limpio, es uno de los remedios de urgencia más eficaces. Lo único que tienes que hacer es mojarlo con agua tibia, presionar sobre la herida y mantenerlo durante medio minuto, aproximadamente. Generalmente, solo con este gesto conseguirás parar la hemorragia.
Resúmenes – El sangrado de la mayoría de las heridas puede detenerse aplicando presión directa sobre la herida. Esto evita la interrupción del suministro sanguíneo al miembro afectado. Cuando el sangrado es severo y una arteria principal ha sido afectada, la presión puede resultar insuficiente y puede ser necesario colocar un torniquete.
Una cortadura es una ruptura o abertura en la piel. También se le llama laceración. La cortadura puede ser profunda, lisa o mellada. Puede estar cerca de la superficie de la piel o afectar tejidos más profundos. Una cortadura profunda puede afectar los tendones, los músculos, los ligamentos, los nervios o el hueso.
Sangrado Problemas con el funcionamiento (movimiento) o sensibilidad (entumecimiento, hormigueo) por debajo del sitio de la heridaDolor
Se puede presentar infección en caso de algunas cortaduras y heridas penetrantes (punzantes). Las siguientes heridas son más propensas a resultar infectadas:
Mordeduras o picadurasPuncionesLesiones por aplastamientoHeridas suciasHeridas en los piesHeridas que no se trataron con rapidez
Si la herida está sangrando profusamente, llame al número local de emergencias, como el 911 (en los Estados Unidos). Las heridas menores y las punciones se pueden tratar en casa. Proporcionar los primeros auxilios de manera oportuna puede ayudar a prevenir una infección, y por lo tanto, acelera la curación y reduce la cantidad de cicatrices.
Lávese las manos con jabón o un limpiador antibacteriano para prevenir una infección. Luego, lave completamente la herida con agua y un jabón suave. Use presión directa para detener el sangrado. Aplique un ungüento antibacteriano y un vendaje limpio que no se pegue a la herida.
EN CASO DE PUNCIONES MENORES:
Lávese las manos con jabón o un limpiador antibacteriano para prevenir una infección. Enjuague el sitio de la punción durante al menos 5 minutos con agua corriente y luego lave con jabón. Busque objetos dentro de la herida (pero no hurgue). Si encuentra alguno, no lo retire. Acuda a la sala de emergencias o centro de urgencias. Si no puede ver nada dentro de la herida, pero falta un fragmento del objeto que la causó, busque también atención médica. Aplique un ungüento antibacteriano y un vendaje limpio que no se pegue a la herida.
NO suponga que una herida menor está limpia porque no se pueden ver desechos ni suciedad dentro de ella. Lávela siempre.NO respire sobre una herida abierta.NO trate de limpiar una herida extensa, especialmente después de que el sangrado esté bajo control.NO retire un objeto largo o profundamente incrustado. Busque atención médica.NO hurgue ni retire los restos de una herida. Busque atención médica.NO reintroduzca partes expuestas del cuerpo. Cúbralas con material limpio hasta que llegue la ayuda médica.
Llame al número local de emergencias (911 en los Estados Unidos) si:
El sangrado es profuso o no se puede detener (por ejemplo, después de 10 minutos de presión).La persona no puede sentir la zona lesionada o esta no funciona bien.La persona está gravemente lesionada de otra manera.
Llame de inmediato a su proveedor de atención médica si:
Si te cortas con un cuchillo Lava la herida: solo si es necesario. Los cortes en el hogar suelen ser limpios y la sangre protege que no entren gérmenes. Pide ayuda: para no marearte y más si se trata de una herida profunda. Amputación: coge el dedo en una gasa y llévalo al hospital por si puede suturarse.
La anemia debida a una hemorragia abundante se produce cuando la pérdida de glóbulos rojos es superior a su producción.
Cuando se pierde sangre, el cuerpo absorbe agua rápidamente de los tejidos hacia el torrente sanguíneo con el fin de mantener los vasos llenos. Como resultado, la sangre se diluye y el hematócrito (el porcentaje de glóbulos rojos en la cantidad total de sangre del organismo o volumen total de sangre) se reduce.
Con el tiempo, una sobreproducción de glóbulos rojos por la médula ósea llega a corregir la anemia. Sin embargo, con el paso del tiempo, la hemorragia reduce la cantidad de hierro en el organismo, lo que impide que la médula ósea aumente la producción de nuevos glóbulos rojos para reemplazar los que se han perdido.
Al principio, los síntomas de la anemia pueden ser graves, en especial si esta se desarrolla rápidamente como consecuencia de una pérdida repentina de sangre debida a una lesión, una intervención quirúrgica, un parto o una rotura de un vaso sanguíneo.
El suministro de oxígeno se reduce drásticamente debido a la rápida reducción del número de células encargadas de su transporte.
Es mucho más frecuente que la pérdida aguda de sangre y puede provenir de diferentes partes del cuerpo. A diferencia de las grandes cantidades de sangre perdida, como en las hemorragias nasales o en las hemorroides, cantidades de sangre más pequeñas pasan fácilmente inadvertidas.
Por ejemplo, una pequeña cantidad de sangre puede no ser visible en las heces. Este tipo de pérdida hemorrágica se conoce como sangre oculta. Si una pequeña hemorragia perdura durante mucho tiempo, puede perderse una cantidad significativa de sangre. Esta hemorragia gradual se produce en trastornos frecuentes, como úlceras Úlcera gastroduodenal Una úlcera gastroduodenal es una llaga circular u ovalada que aparece en el lugar donde se ha erosionado la mucosa gástrica o duodenal por la acción del ácido y los jugos digestivos del estómago.
obtenga más información de estómago o intestino delgado, pólipos Pólipos de colon y recto Un pólipo es un crecimiento que sobresale del tejido de la pared de un espacio hueco, como el intestino. Algunos pólipos son causados por trastornos hereditarios. El síntoma más frecuente es. obtenga más información en el intestino grueso, o cáncer del intestino grueso Cáncer colorrectal Los antecedentes familiares y algunos factores de la dieta (poca fibra, muchas grasas) aumentan el riesgo de padecer cáncer colorrectal.
¿Cómo puedo saber si es necesario ponerle puntos al corte de mi hijo? – Andrea La mayoría de los niños se hacen moretones, rasguños y cortes de tanto en tanto. Muchos cortes pequeños se pueden tratar en casa, lavando la herida y usando un vendaje o una tirita.
sigue sangrando después de haber estado apretándolo durante 5 minutos seguidos es muy grande o muy ancho parece ser profundo afecta a la cara, los labios o al cuello de su hijo tiene un trozo de vidrio u otro objeto extraño en su interior hay un objeto saliendo de la herida, como una ramita sale sangre a chorros de la herida
Si del corte sale sangre a chorros, es posible que se haya visto afectada una arteria. Es importante ejercer presión sobre el corte con un paño limpio de inmediato. La herida debería ser atendida en una clínica de urgencias o en el servicio de urgencias médicas de un hospital lo antes posible.
Clasificación de las heridas – Las heridas se pueden clasificar desde diferentes puntos de vista o aspectos. A continuación veremos algunos de los más comunes, si bien se pueden encontrar otras categorizaciones: Según el objeto o el mecanismo causante, la herida puede ser:
Cortante o incisa: Es ocasionada por un objeto cortante, como un cuchillo o un vidrio. Los bordes de la herida están limpios y definidos. En este tipo de heridas, el sangrado suele ser abundante. Punzante : Es producida por un objeto punzante, como un clavo. La gravedad de la herida depende de la profundidad y de si daña nervios o vasos sanguíneos. Contusa : Es ocasionada por el impacto de un objeto como una piedra o un martillo. En estas heridas, los bordes son irregulares y suelen presentar un hematoma. Por desgarro : Es producida por objetos con dientes en su parte cortante, como una motosierra. Los bordes son irregulares. Por raspadura : Producidas por objetos con dientes o palas, como una trituradora de comida, o por el asfalto, cuando la piel se arrastra por él en un accidente de tráfico y la carne queda al descubierto.
Según la profundidad, la herida puede ser:
Superficial : Cuando solo atraviesa la piel. Profunda : Cuando la herida atraviesa el tejido subcutáneo. Penetrante : Cuando penetra una cavidad, como puede ser la boca, el abdomen, la vagina, etc. Perforante : Cuando atraviesa el cuerpo.
Según la cicatrización, la herida puede ser:
Aguda : Es aquella que el organismo es capaz de cerrar o sanar en el tiempo esperado. La cicatrización se producirá sin infección y en un periodo que suele oscilar entre siete y catorce días. Crónica : Es aquella que el organismo no puede cerrar o sanar en el tiempo esperado, ya que la herida suele ser más profunda y la zona suele estar inflamada. El proceso de reparación y cicatrización es desordenado se alarga en el tiempo.
Según su riesgo de infección, la herida puede ser:
Limpia : Es la realizada en un entorno aséptico, por ejemplo en un quirófano. Contaminada : Ha estado expuesta a bacterias un corto periodo de tiempo. Sucia o infectada : Ha estado expuesta a bacterias un periodo largo de tiempo
Según la integridad de la piel, la herida puede ser:
Abierta : Se observa la separación de los tejidos blandos de la piel. Estas lesiones tienden a infectarse con facilidad. Cerrada : No se observa lesión aparente, pero hay hemorragia debajo de la piel, en cavidades o vísceras. Así, los tejidos dañados no están expuestos al exterior.
Según la gravedad de la herida : Es probablemente una de las categorizaciones más representativa. Una herida puede ser leve o grave. La gravedad se medirá en función de otros factores: si la herida es superficial o profunda, si está contaminada o no, si está abierta o cerrada, si el objeto o mecanismo que lo ha causado puede quedar en el interior del cuerpo, etc.